Gestionar los celos ante la llegada de un hermanito
La llegada de un nuevo hermano o hermana es un acontecimiento que puede despertar emociones encontradas en el niño mayor. Por un lado, pueden sentir curiosidad, emoción y afecto por el nuevo miembro de la familia, pero por otro, pueden experimentar celos, inseguridad y frustración por tener que compartir la atención y el afecto de sus padres.
Los celos son una manifestación emocional que da lugar a comportamientos completamente normales y esperables en los niños pequeños cuando llega un hermano.
Sólo hay que ponerse en el lugar del niño que ha sido el único receptor del afecto y la atención de sus padres hasta ese momento.
Sin embargo, los celos no tienen por qué ser un problema si se gestionan adecuadamente y se ayuda al niño a adaptarse a la nueva situación. Los padres pueden hacer mucho para prevenir y reducir los celos de su hijo mayor y fomentar una buena relación entre hermanos.
¿Cómo prevenir los celos antes del nacimiento del bebé?
Los padres pueden empezar a preparar al niño para la llegada del bebé durante el embarazo siguiendo algunas pautas, como:
- Hablar al niño del bebé con naturalidad y cariño, explicándole cómo está creciendo dentro de la barriga de mamá y qué cosas podrá hacer con él cuando nazca.
- Implicar al niño en los preparativos del bebé, como la elección de su ropa, su cuna o su nombre, haciéndole sentir parte importante del proceso.
- Mantener las rutinas y hábitos del niño en la medida de lo posible, incluyendo sus horarios, actividades y momentos de juego con los padres.
- Reforzar su autoestima y seguridad recordándoles lo mucho que les quieren y lo especiales que son para sus padres.
- Anticiparse a los cambios que se producirán cuando nazca el bebé, como que tenga que ir al hospital unos días, que llore y duerma mucho o que la mamá tenga que darle el pecho.
- Buscar el apoyo de familiares o amigos para que cuiden del niño cuando nazca el bebé, para evitar que se sienta solo o abandonado.
¿Cómo reducir los celos tras el nacimiento del bebé?
Una vez que el bebé está en casa, los padres pueden seguir algunas recomendaciones para minimizar los celos del hijo mayor y facilitar su adaptación a la nueva realidad familiar:
- Dar al hijo mayor un papel protagonista en la llegada del nuevo hermano, como protector, maestro y cuidador. Los padres pueden asignarles tareas sencillas, sin abrumarles con responsabilidades, y respetar su disponibilidad para participar en el cuidado del recién nacido.
- Dedicar tiempo de calidad al hijo mayor, aprovechando los momentos en que el bebé duerme o está con otra persona. Los padres pueden realizar actividades que le gusten al niño, como leerle un cuento, jugar con él o ir al parque.
- Evite comparar a los hermanos, tanto en sentido positivo como negativo. Cada niño es único y tiene su propio ritmo de desarrollo. Los padres deben valorar las cualidades y logros de cada niño sin hacerles competir entre sí.
- Mostrar comprensión y empatía hacia las emociones del hijo mayor, sin reprimirle ni castigarle por sentir celos. Los padres deben escucharles, validar sus sentimientos y ayudarles a expresarse con palabras o dibujos.
- Sin necesidad de castigarles, expresen su desaprobación ante las muestras de celos o rivalidad hacia su hermano. Los padres deben establecer límites claros y firmes para los comportamientos agresivos o desafiantes del hijo mayor hacia el bebé o hacia ellos mismos.
- Fomentar una convivencia armoniosa entre los hermanos favoreciendo el contacto físico, el afecto y la cooperación entre ellos. Los padres deben elogiar las actitudes positivas del hijo mayor hacia el bebé y crear momentos de diversión compartida.
Conclusión
La llegada de un nuevo hermano o hermana es una oportunidad para que el mayor crezca emocionalmente y aprenda valores como el amor, la generosidad y la solidaridad. Los padres pueden acompañarles en este proceso con paciencia, comprensión y cariño, sin dejar de atender sus necesidades y teniendo en cuenta que los celos son una reacción normal y pasajera.